domingo, 22 de marzo de 2009

Breves

1


A espada y vino
me sabían tus besos,
densos y vivos.


Sobre las aguas
apacientan tus ojos
sombras y almas.

3


Busco en la tierra
los recuerdos, mojados
de amor y pena.


4


Son tus labios alados
palomas ciegas
que me anidan la boca
de pluma y niebla.


5


Ay, qué regalo:
me decías '¿de veras?'
con qué recato.


 

4 comentarios:

  1. Más que haikus, por la rima, estos versos tienen aires de seguidilla. Como sabes, el haiku puro no rima; cuando lo hace, a mí me sabe más a coda de seguidilla y entonces no me resisto a la tentación de escribirle los cuatro versos iniciales y formar la seguidilla compuesta correspondiente: me ha pasado más de una vez.
    Dejando a un lado los aspectos formales, tus versos son estupendos; los poemas 2 y 3 son los que más se acercan, por su contenido, al haiku, que se origunan en una comtenplación de la naturaleza, en el deseo de perpetuar una instantánea. El tema amoroso, de nuevo, me parece más conveniente al molde de la seguidilla.
    Un abrazo, amigo Benjamín, y enhorabuena.

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  2. Gracias por la lección. La verdad es que empleaba la etiqueta "haiku" solo como un reclamo, una concesión descuidada a la moda. Y no sé renunciar a la asonancia en estos metros tan cortos. Quedarían cojos en mi oído. Y el tema amoroso es casi fijo en este blog. En todo caso me alegro mucho de que te gusten estos versos breves.

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  3. Grandes en delicadeza esas breverias. La tercera es...
    Un saludo y un beso, Ben.
    Anabel.

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  4. Cuando se tiene talento y poesía en el alma, no se necesita escribir largo y tendido. Yo soy amante de lo breve e intenso. De los poemas cortos pero que dejan buen sabor de boca, como son siempre los tuyos.

    Besos, Benjamín ;)

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